La joven jugadora de vóley Martina Franco, surgida del club Red Star de San Lorenzo, atraviesa un gran momento deportivo en los Estados Unidos, donde se incorporó al equipo de la University of Texas Rio Grande Valley (UTRGV). Su presente fue destacado recientemente por un canal de televisión norteamericano, que dedicó una nota especial a su historia y su proyección internacional.
En el informe, la prensa estadounidense resalta “sus golpes acrobáticos y aces de servicio al corte”, describiéndola como una jugadora clave en el gran desempeño de UTRGV, que alcanzó una racha de seis victorias consecutivas. “Es una capacidad que desarrollé desde que tenía cinco años, cuando crecí en Argentina”, comentó la deportista, quien recordó que el vóley no fue su primera pasión, pero que su padre la animó a seguir hasta descubrir en ese deporte una verdadera vocación.

Martina inició su carrera universitaria en UTSC y este año decidió trasladarse a UTRGV, donde -según contó- la adaptación fue más sencilla gracias a su compañera Isabela Costantini, también argentina. “Isabela estuvo ahí para mí desde el primer día, respondiendo todas mis preguntas y haciéndome sentir como en casa”, relató.
En agosto pasado, Franco fue convocada por la selección nacional argentina para participar en el Campeonato Mundial Sub 21 de la FIVB, disputado en Indonesia, donde el equipo albiceleste logró el séptimo puesto a nivel global. La jugadora consideró aquella experiencia como una prueba de su crecimiento: “Vine a Estados Unidos para mejorar, y este torneo fue la oportunidad perfecta para comprobarlo. Fue un salto de fe que terminó dando sus frutos”.

Hoy, de regreso en su equipo universitario, Martina combina su experiencia internacional con el desafío académico de alcanzar un doctorado. “Mi objetivo final es convertirme en jugadora profesional y siento que UTRGV me da las herramientas para lograrlo. Sé que tomé la decisión correcta al venir aquí”, expresó, confiada en que “el esfuerzo diario siempre paga”.
Desde Red Star, el club que la vio dar sus primeros pasos, celebraron con orgullo su presente: “Martina sigue creciendo a paso firme y representa nuestros valores de disciplina, compromiso y pasión. Su camino inspira a las nuevas generaciones del vóley sanlorencino”, compartieron en sus redes sociales.

El caso de Martina Franco es una muestra del talento que surge de las instituciones locales y que, con trabajo y oportunidades, puede trascender fronteras. Apoyar al deporte de base -como el que promueven los clubes de barrio- no solo forma atletas, sino también historias que inspiran y emocionan.
