El joven fotógrafo es alemán. La policía neuquina le retuvo los equipos, lo golpeó y lo mantuvo cautivo durante varias horas.
El joven fotógrafo es alemán. La policía neuquina le retuvo los equipos, lo golpeó y lo mantuvo cautivo durante varias horas.
Un fotógrafo alemán denunció ser detenido y torturado luego de haber sacado unas fotografías en las cual mostraba la contaminación en un basurero petrolero en Añelo, en la provincia de Neuquén, en lo que es la zona de los yacimientos de Vaca Muerta.
Stefan Borghardt es un fotoperiodista alemán de 28 años de edad, y se encuentra en Argentina realizando un trabajo audiovisual sobre el fracking (una actividad minera altamente contaminante practicada en varios países del mundo) en los yacimientos de Vaca Muerta y el Alto Valle rionegrino. El joven europeo nunca pensó que pasaría una odisea como la que vivió.
El pasado lunes, alrededor de las 18 horas, luego de sacar algunas fotografías de la contaminación que presentan los basureros petroleros de la empresa Treater Neuquén S.A., uno de los supervisores llamó a la policía de la localidad de Añelo. Posteriormente, el personal policial comenzó con las requisas: le secuestraron las dos cámaras al fotógrafo, y comenzar a indagar su celular, escuchando mensajes de audio sin autorización de su propietario.
Todo lo que vivió este joven alemán lo difundió en su cuenta de Facebook, en un texto completamente en castellano. “Ya tenían evidencia de que yo era periodista por mi carné de prensa que se los había presentado. Me hicieron dejar todas mis cosas arriba de la barra de atención. Me hicieron un montón de preguntas mientras la oficial labraba el acta de mis pertenencias. Cuando me apresuró para que lo firmara, insistí en leerlo con calma antes de poner mi firma abajo, para asegurarme que estaba todo documentado de forma correcta. Se enojó y me llevó a un calabozo, empujándome e insultándome. En el primer calabozo me pegaron, me patearon y un oficial que me maltrataba con una escoba desde lejos me dijo que odiaba a todos los alemanes”, expresó Stefan.
Privado de su libertad, permaneció hasta las 22:30 del lunes, momento en el que los policías lo dejaron irse, pero sin devolverle dos cámaras profesionales con las que el joven realiza su trabajo. El fotógrafo pudo difundir algunas imágenes de lo que son los basureros petroleros de Vaca Muerto, fotos que sacó con su teléfono celular.
También, Stefan aclaró que notificó a la embajada alemana de lo sucedido.
Las imágenes pertenecen a Stefan Borghardt, publicadas en su perfil de Facebook.