Greenpeace irá de Polo a Polo por la protección de los Océanos

Greenpeace comenzó el 11 de abril una de sus más grandes expediciones; un viaje de casi un año del Ártico a la Antártida, para exponer las múltiples amenazas que enfrentan los océanos y pedir por un Tratado global que proteja los mares por fuera de las zonas exclusivas nacionales.

La travesía tendrá como escalas aquellas áreas que se han identificado como prioritarias para la protección en un innovador informe realizado por la Universidad de York presentado la semana pasada. Equipos de científicos y activistas de la organización harán el relevamiento de las amenazas de cambio climático, sobrepesca, contaminación de plástico, minería en el fondo del mar y explotación petrolera.

En región cercana a la Patagonia el Barco Esperanza llegará hacia fin de año para denunciar el daño que genera la pesca industrial descontrolada en los mares y en especies  marinas como la ballena franca austral y otros mamíferos.

“Los océanos de nuestro planeta están amenazados”, dijo Estefanía González de Greenpeace Andino. “Este viaje nos llevará al frente de batalla para defenderlos, a trabajar junto a científicos de primer nivel para comprender cómo están cambiando nuestros mares y su biodiversidad y qué podemos hacer para protegerlos.”

Las negociaciones para un Tratado Global de los Océanos en las Naciones Unidas ya comenzaron y es vital que los gobiernos vayan en esa dirección. Necesitamos un tratado sólido que permita luego crear áreas protegidas de las actividades destructivas. La ciencia es clara, necesitamos una red de santuarios marinos que cubra al menos el 30 por ciento de los océanos para 2030 si queremos defender las especies, combatir el cambio climático y dar seguridad alimentaria a millones de personas. Nuestro destino está íntimamente ligado al destino de los océanos.

 

 Tratado Global de los Océanos

La semana pasada se realizó la segunda de cuatro rondas de negociaciones en la ONU para lograr un tratado que cubra las aguas internacionales. La tercera ronda de negociaciones se llevará a cabo en Nueva York en agosto de 2019, y se espera que el proceso concluya con una cuarta y última ronda en la primavera de 2020.

Un Tratado Global sólido podría proporcionar el marco legal para la protección de las aguas internacionales, haciendo posible la creación de Áreas Marinas Protegidas o "santuarios oceánicos", libres de actividades humanas destructivas. Greenpeace está solicitando una red de santuarios oceánicos que cubra al menos un tercio de los océanos del mundo para 2030, de acuerdo a lo propuesto por científicos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y recibido por un número creciente de gobiernos.

 

FOTOS: Informe y Greenpeace