Una fecha patria para recordar y mantener vigente.
Una fecha patria para recordar y mantener vigente.
Durante la presidencia del General Edelmiro J. Farrell, por iniciativa del Instituto Nacional Sanmartiniano, se tomó la decisión de realizar un Homenaje al "Soldado Desconocido de la Independencia" y se designó al ministro Juan Domingo Perón, la organización del acto.
Fue así que se promulgó el decreto N° 14.932 de 1945 donde se considera que “la Nación no ha saldado aún la gran deuda de gratitud con los soldados argentinos que constituyeron la masa de los ejércitos libertadores que se batieron por la independencia en los territorios de la Patria, Chile, Perú, Ecuador, Bolivia, o bien constituyendo las tripulaciones de nuestros navíos en los ríos y mares del sur”.
La normativa agrega también que la mayoría de esos soldados “murieron luchando con bravura por la libertad, contribuyendo con su sangre a las victorias que, con justa razón, nos enorgullecen”.
Los agregados militares de Chile, Bolivia, Perú y Ecuador, con la venia de los respectivos embajadores, realizaron las gestiones ante los gobiernos de sus repúblicas. Se reunieron e incineraron restos de los caídos en los campos de batallas de Chacabuco, Cancha Rayada, Maipú, Pichincha, Riobamba, Junín, Ayacucho, Suipacha, Sipe Sipe y Cerro de Pasco.
Los restos de Perú y Ecuador se reunieron en Chile para ser entregados en El Plumerillo en Mendoza. Los restos de Bolivia se recibieron en La Quiaca y se unieron con los caídos en las batallas de Salta y Tucumán en los combates a las órdenes de Güemes trayéndolos por Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, San Juan y Mendoza. Se deseaba entregarlos al pie del Cristo Redentor en los Andes, pero la estación invernal no lo permitió.
También Montevideo aportó sus sagradas reliquias y se le sumaron restos de Granaderos caídos en San Lorenzo e inclusive la Armada aportó gloriosas reliquias de marinos desconocidos, sepultados en la isla Martín García.
De las batallas o combates en donde no pudo recuperarse ninguna osamenta, se extrajeron algunas paladas de tierra del campo de batalla.
Todos esos restos se incineraron y fueron colocados dentro de una Urna confeccionada con el bronce de un cañón de la Independencia que viajó desde Mendoza a Buenos Aires en el Tren Presidencial, custodiada por un piquete de Granaderos a Caballo. En cada pueblo por donde el tren pasaba, la urna fue descendida, para que fuese venerada por el pueblo reunido en cada estación.
Cuando todo estuvo listo, al llegar a la capital del país, cien antorchas llevadas por la gente iluminaron la noche del homenaje y quedó una de ellas encendida desde entonces, la “antorcha de la argentinidad”, custodiando y enmarcando este homenaje que se hizo hace 74 años en las puertas de la Catedral Metropolitana de Buenos Aires.
Por decreto Ley Nº 12.387 se instituyó desde aquel 17 de agosto de 1945 el día del Libertador y del "Soldado Desconocido de la Independencia" que inmolara su vida “por la Libertad e Independencia de su Patria”.
Desde entonces el Soldado Desconocido y el General San Martín comparten el mismo Mausoleo y también comparten fecha de recordación. Por fuera de la urna dice: "soldado desconocido de la independencia. Dio todo a la patria, y nada le pidió".