“Esta sarta de tarados”

El título que lleva esta editorial es lo que dijo el intendente de Capitán Bermúdez, Daniel Cinalli, al referirse a la grave situación institucional que vive esa ciudad con homicidios, asaltos, narcocriminalidad y todo delito que ande dando vuelta por ahí. 

Es evidente la intención de Cinalli de sacarse el problema de encima con declaraciones de este tipo, donde reduce un problema complejo a una frase que tiene como finalidad ilustrar una realidad inexistente, es decir, negar lo que ocurre en su ciudad y cargarle la responsabilidad a la conducta de dos o tres tarados sueltos o como si se tratara de jóvenes maleducados que molestan con sus actitudes patoteriles la tranquilidad de un pueblo.

En verdad, se está asistiendo a una realidad compleja por las características en las que se fue desarrollando. Cuando existe una complicidad entre el poder político, policial y delictivo, comienzan a ocurrir estos hechos de violencia: robos, asaltos a mano armada, homicidios en ocasión de robos, ingresos violentos a las casas de los vecinos, ejecuciones en plena calle, balazos a propiedades hiriendo a personas, garitos clandestinos de juegos, gerenciamiento de puertos secos, recaudaciones del comercio de drogas, lavado de activos, y un largo etcétera, que termina hastiando a los ciudadanos por sufrirlos y por presenciarlos.

Por eso la referencia a “crisis institucional”, porque todo esto remite a una incapacidad por omisión o a una actitud por acción, que generan un debilitamiento de las autoridades como instituciones establecidas, al no querer o no poder controlar una situación que crece día a día.

Entonces, intentar exorcizar un mal con una frase hecha, como si fuera un comentarista de la realidad, es un síntoma de que no tiene demasiado interés en el asunto. Y la demostración más cabal de su conducta es justamente que Cinalli vive en Rosario. De manera que desde su posición privilegiada en otra ciudad, puede emitir comentarios tarados sin sentirse involucrado en un problema que es exclusivo de los habitantes de Capitán Bermúdez.

Aunque la policía y el poder judicial tienen su responsabilidad en el acontecer diario, son los representantes políticos los verdaderos artífices de que se solucionen los problemas, porque la sociedad elige a sus representantes no solo para administrar, sino también para cambiar todo aquello que sea necesario cambiar con el objetivo de vivir mejor. 

Mejores leyes, gestiones eficientes, liderazgo en acción, ejemplos de vida, son las características principales que deben reunir los funcionarios a la hora de gobernar. Y para no decir taradeces.