Nito Palacios en su clásico programa “La Voz de la Libertad”
Este miércoles se conoció la triste noticia del fallecimiento de Mariano “Nito” Palacios, el mítico difusor del folclore argentino en medios radiales y escenarios de la región, como el festival “San Lorenzo, un Canto a la Libertad” que lo tuvo como conductor principal a lo largo de 25 ediciones.
Su desaparición física deja vacío un lugar enorme en la cultura popular de la región, a la que defendió a través de la difusión de las obras de los artistas más destacados y de los emergentes.
Gran conocedor de las costumbres y del ser argentino, Nito se destacaba por su generosidad a la hora de compartir esa “sabiduría popular” con quien quisiera escucharlo. De ahí el éxito que siempre lo acompañó a lo largo de su carrera radial y como maestro de ceremonias.
Años atrás, SINTESIS tuvo la oportunidad de entrevistarlo y repasar su rica historia persona, en un reportaje que compartimos:
“Felizmente la gente me reconoce y me respeta”
Amante y difusor del folclore argentino desde la radio y desde los escenarios, se convirtió en uno de los personajes más reconocidos de la cultura popular. Charló con SÍNTESIS contando su historia y sobre el lugar que supo construir desde la pasión por “nuestro arte”.
Vino al mundo como Mariano Emeterio Palacios, pero todos lo conocen como “Nito”, único sobreviviente de una generación de personas de la región ligada al folclore argentino que casi no tiene continuadores, sigue luchando por difundir las expresiones artísticas que llegan, fundamentalmente, desde la música.
“Cosquín nace en el ‘61 y yo fui en el ‘63 por primera vez, además de que en el ‘64 estuve como espectador en el Primer Festival del Litoral que se hizo en el Campo de la Gloria. Me sentía atraído por aquellos viejos cultores como Yupanqui, María Helena, el Cholo Aguirre, Los Huanca Hua, los Trovadores del Norte, que ya empezaban a trascender a través de Cosquín y llegaron a nuestra ciudad por primera vez. Era la época en que empezaba la renovación del folclore y se vendían cada vez más guitarras porque todos queríamos sumarnos”, recuerda Nito.
“Por aquellos años también tuve una disyuntiva: por un lado, llegaban The Beatles con una nueva música y desde Salta venía un brote de música y poesía con nuevas canciones y con grupos como Los Fronterizos o Los Chalchaleros, entre otros grandes. Pero, me incliné por el folclore y nunca más dejé esa esa línea”, agregó.
Cuando Nito Palacios habla de “folclore” también incluye al tango. “Me fui de San Lorenzo en el año ‘68 a trabajar a Buenos Aires y eso me llevó a conocer otra música y otra gente. Aunque frecuentaba míticos lugares del folclore como ‘Palo borracho’ o ‘El Hormiguero’ que frecuentaban gigantes como Carlos Torres Vila o el Chango Nieto, también me gustaba el tango y concurría al famoso ‘Caño 14’ y lugares en los que incluso llegué a interpretar algunos temas, pero nada profesional, aunque me llevó a conocer a muchos artistas”.
Entre las muchísimas anécdotas de esos años capitalinos, Nito Palacios recuerda una muy especial: “El 22 de junio de 1972 nació mi hija Paula y esa noche, para festejar, salí con un amigo que me llevó a la casa del Polaco Goyeneche que también vivía en Saavedra como yo. Nos recibió con una tremenda sencillez porque era un personaje de barrio. Para mí es un recuerdo inolvidable”.
Nito rodeado por su hijo Marcelo y su esposa Liliana
“Los tres amigos” y la radio
Después de su época en Buenos Aires, Nito –que comenzó en escenarios escolares en los que participaba en todos los actos recitando o bailando- regresó definitivamente a San Lorenzo y al folclore.
En aquel entonces “vuelvo a integrarme al Centro Folclórico Cultural Aldo Saravia donde me estaban esperando los viejos amigos con los que me encontraba cuando regresaba cada tanto. Fue entonces que con Juan ‘el Pavo’ Martín y Carlitos Oronao armamos un trío que se llamaba ‘Los Tres Amigos’. Ahí comenzamos a andar con la música, muchos años, por toda la región con zambas, gatos, chacareras y algunos temas del Litoral”.
“En una oportunidad Julio Boschetti, integrante de la comisión directiva del Aldo Saravia, nos propuso hacer un programa de radio, porque, la verdad, no había muchos espacios para la música folclórica. Fue así que se puso en contacto con Luis Bolmaro, por entonces director de la radio municipal y la mañana del domingo 11 de agosto de 1996 debutamos con Carlitos y el Pavo Martín con ‘La Voz del Centro Aldo Saravia'”.
Aquella primera experiencia radial de Nito se prolongó varios años. “A poco de empezar, Carlitos Oronao desertó porque tenía otras actividades así que seguimos con Juan hasta que él asume como jefe de Defensa Civil Municipal y me quedé solo durante cinco años conduciendo aquel programa”. Tiempo después el envío dominguero continuó con el regreso de Martín hasta su fallecimiento en 2022.
Por su parte Nito le dio vida al que hoy es un clásico: “La Voz de la Libertad” que comenzó “cuando mi amigo ‘Titi’ Rodríguez me abre las puertas en su ‘Radio Urbana’ que estaba en la calle Rioja. Tiempo después me vino a buscar Ricardo Lazo y llevamos el programa a la FM Punta Quebracho de Puerto General San Martín. Al poco tiempo vino a mi casa Hugo Bruscaglia y nos mudamos a La Radio de la misma ciudad, más tarde volvimos a la FM Universal de la Municipalidad de San Lorenzo y, por último, después de la pandemia me radiqué donde estoy actualmente, en la radio 102.9, Nueva Estrella, los jueves de 18 a 20”, resumió.
“Ya llevo 27 años haciendo radio y siempre con la misma intención de difundir esta cultura que tanto me gusta”, asegura Nito Palacios pero aclara: “Difundimos no solo a los que todos conocen por estar de moda sino, además, recordando que el folclore se cimentó con grandes voces como las de Los Andariegos, Los Cantores del Alba, Los Chalchaleros, Los Fronterizos, Los Cantores de Quilla Huasi. Además, es necesario apoyar a los artistas de la región, tengan o no tengan trayectoria”, sentencia Nito.
Cuando se le pregunta quién va a seguir portando sus mismas banderas culturales, lamenta: “Creo que no hay sucesores, porque a esto hay que amarlo con pasión. Yo me formé leyendo mucho, hablando con quienes saben, viviendo, nutriéndome de todo lo que podía, de grandes artistas que me dejaron algo”, expresa.
Después enumera sus preferidos de siempre. “El Chango Nieto que no solo era un gran cantante sino también un excelente ser humano; soy amigo y admirador de Los Cuatro de Córdoba desde hace muchos años y me siento muy identificado con ellos; tengo el honor de haber traído por primera vez a San Lorenzo a Soledad Pastorutti cuando era una niña, después de haber conocido a su padre en Casilda y me confieso enamorado de las voces de Valeria López Vila y de Paola Arias”, enumera.
Dejando de lado entre sus gustos personales –por obvias razones- a su hijo, el cantante Marcelo Palacios, Nito asegura que “aunque no se les da la importancia que se merecen hay grandes artistas locales que siguen para adelante con su talento como Facu Leguizamón, Rodri Quinteros o Patricia Verón, entre otros, que se siguen tratando de imponer con lo suyo. A ellos les pido que no abandonen esa huella”.
Por último, a requerimiento de SÍNTESIS, Nito Palacios se define como “un hombre al que le gusta el folclore, ese que me llevó a conocer a artistas y a grandes personas. Este oficio me permitió haberme hecho un poquito conocido y a lograr -a esta altura de mi vida- el respecto de la gente”.