Es Posible
Por los senderos,
conocidos por los caciques,
que custodiaban
las tribus.
Cerca, de donde
anidan los cóndores,
y se ven,
los picos nevados.
Por ahí cruzó.
Caminaban los mulatos,
los negros, los pobres,
orgullosos de la bandera
bordada por las damas mendocinas.
Tan alto y tan cerca,
tan próximo,
tan alto,
ahí estaba El General.
Había escuchado,
la voz del pueblo:
soplo de aires,
fuerza del viento.
Armó su ejército,
y cruzó los Andes.
Don José cabalgó, navegó,
y a ras de tierra,
nos dijo: la patria grande,
es posible.
María Elena Molina
Rosario – Santa Fe