El senador Traferri sostiene que el Estado debe brindar la contención necesaria para que los alumnos que atraviesan un embarazo, eviten la deserción escolar.
El senador Traferri sostiene que el Estado debe brindar la contención necesaria para que los alumnos que atraviesan un embarazo, eviten la deserción escolar.
El senador provincial por el Departamento San Lorenzo, Armando Traferri, presentó un proyecto de ley que brinda diferentes regímenes para alumnas y alumnos de nivel secundario que atraviesan un embarazo, apuntando a “combatir la deserción y el abandono escolar y brindar herramientas concretas para quienes atraviesan este proceso”.
En el proyecto elaborado por Traferri y su equipo –que fue presentado en la última sesión de la Cámara de Senadores de Santa Fe- se indagan los diferentes escenarios, desde los más convencionales hasta los menos deseados, por los que pueden llegar a pasar las madres, padres e, incluso, sus hijos. “Todas las medidas actuarían como paliativo para que los estudiantes logren retomar sus estudios de la manera más eficaz posible”, explicó Traferri.
Si bien, muchas veces las instituciones educativas brindan el apoyo necesario a sus estudiantes, en la actualidad no hay ninguna norma vigente que contemple el tema.
“Es necesario brindar herramientas concretas a las alumnas embarazadas y a los alumnos en condiciones de paternidad que cursen sus estudios en instituciones públicas o privadas, dependientes del Ministerio de Educación de la provincia”, aseguró el legislador sanlorencino.
Detalles del proyecto
Como primer punto se plantea la creación de un Régimen Especial de Inasistencias Justificadas no computables para los alumnos, tanto de instituciones públicas como privadas, que atraviesen un proceso de embarazo. Los solicitantes de dicho régimen serán los mismos alumnos, mediante constancias médicas que acrediten lo solicitado.
Una vez completado el proceso de aprobación, los alumnos serán beneficiados con diferentes medidas que los ayudarían a llevar un mejor proceso de embarazo y parto.
En primera instancia las alumnas embarazadas gozarán de un plazo máximo de inasistencias justificadas, continuas o fraccionadas, no computables a los fines de la reincorporación, de 45 días y podrán ser utilizadas antes o después del parto, mientras que los padres contarán con 10 inasistencias justificadas continuas no computables a idénticos fines, a partir del día del nacimiento.
Los plazos podrán extenderse en caso de “nacimiento múltiple, embarazo de riesgo o que la alumna fuera madre de hijos menores de cuatro años de edad, el plazo máximo de inasistencias se extenderá a 15 días más posteriores al nacimiento. Para el caso de los varones en idéntica situación el plazo será de 10 días más”.
En ese sentido, el texto contempla dos potenciales escenarios sensibles que pueden llegar a vivir los alumnos que atraviesan este proceso: uno es la interrupción del embarazo (aborto) y, el otro, es el fallecimiento del feto. Ante ambas eventualidades se prevé la inasistencia justificada durante siete días a fines de la reincorporación de la persona.
Por otra parte, también se considera el período de lactancia de la madre: “las alumnas que certifiquen estar en período de amamantamiento, gozarán del derecho a retirarse de la institución educativa durante 60 minutos diarios, continuos o fraccionados, durante 12 meses, posteriores al parto”.
Asimismo, los alumnos con hijos de hasta un año de edad “contarán con 10 días anuales, continuos o fraccionados, de inasistencias justificadas por razones de enfermedad para el cuidado de los mismos”.
Acorde al texto, el Ministerio de Educación “deberá establecer los mecanismos de apoyo, seguimiento, recuperación y evaluación de los aprendizajes que permitan alcanzar los objetivos requeridos para la promoción de los alumnos regulares”.
Además, sostiene que “las instituciones educativas ejercerán funciones de apoyo a efectos de promover la concurrencia de las embarazadas y de los progenitores a los controles médicos correspondientes”.
“El derecho a la educación es un pilar fundamental de nuestra sociedad, es la condición esencial para la vigencia de otros derechos de fundamental importancia tales como, la igualdad, salud, dignidad del hombre y desarrollo personal. El Estado debe brindar prioritaria atención a las problemáticas vinculadas a la deserción y el abandono de la escolarización”, sostuvo el senador Armando Traferri sobre el momento coyuntural educativo.