Después de la denuncia de las cuatro hermanas, una prima de ellas también denunció haber sido víctima.
Foto: Imagen ilustrativa.
Después de la denuncia de las cuatro hermanas, una prima de ellas también denunció haber sido víctima.
La semana pasada se realizó una audiencia donde Gastón Acuña, uno de los tres acusados de abuso sexual contra cuatro hermanas en la localidad de Puerto Gaboto, fue imputado por la denuncia de una quinta joven, prima de las anteriores denunciantes.
Cabe recordar que tres hombres fueron detenidos a mediados de abril en Puerto Gaboto, acusados de haber violado durante años a, al menos, cuatro hermanitas. Luego de esas detenciones, se conoció el caso de una quinta víctima, prima de las chicas.
Se trata de Fernando y Gastón Iglesias, de 27 y 37 años de edad, respectivamente, quienes son tíos paternos de las víctimas y Gastón Acuña, de 41 años, padrino de una de las niñas.
El jueves de la semana pasada se hizo una audiencia donde se imputó a Acuña, después de haber escuchado el testimonio de una quinta denunciante y se realizó la prórroga de su prisión preventiva – que vencía el viernes - y se determinó que siga en prisión hasta el 20 de agosto.
El abogado que lleva adelante las denuncias de las víctimas, Sebastián Darrichón, explicó que “la doctora Benvenutto, quien suple por licencia de feria a la Dra. Melisa Serena, llevó adelante una nueva imputación por un nuevo hecho que surgió de la investigación que se está llevando adelante en el marco de la declaración de la cámara de Gessel de las niñas, que se hizo el 29 de junio pasado, donde surgieron nuevos hechos a investigar” y aclaró que “de la declaración de la más pequeña de las niñas surge que había sido víctima de abuso por parte de Acuña, por lo que la fiscal imputó ese nuevo hecho y pidió la prórroga de la prisión preventiva, por 90 días más”.
Sin embargo, el juez de feria Ignacio Vacca decidió no dar los 90 días solicitados por la fiscal y la querella, sino que prorrogó la prisión por un plazo que se vence el 20 de agosto próximo, para que se avance con la investigación y con una nueva denuncia que ha sido radicada sobre los mismos hombres acusados.
La primera denuncia
A partir de una denuncia de la madre de las víctimas realizada el viernes 9 de abril, comenzó una investigación que logró los testimonios de las chicas de 7, 14, 15 y 21 años, quienes declararon que los tres hombres las violaban desde temprana edad.
El abogado de la familia de las víctimas, Sebastián Darrichón, en diálogo con SÍNTESIS explicó cómo se llegó a la detención que conmovió al pueblo del Departamento San Jerónimo.
Todo comenzó cuando la madre de las chicas se acercó al abogado a pedirle ayuda porque la mayor de sus hijas había intentado suicidarse en dos oportunidades. Allí empezó la investigación y la articulación con asistencia psicológica y según cuenta Darrichón, “una de las hermanitas le dice que ella sabía por qué su hermana más grande tomaba esa decisión y le dijo: ´a vos te pasa lo mismo que me pasa a mí”, reveló el abogado refiriéndose a lo que la chica de 14 años le dijo a la de 21 que había tenido dos intentos de suicidio: ella sabía que se quería quitar la vida porque su tío la abusaba, y a ella le estaba pasando lo mismo.
Ese mismo día, el abogado acudió con la madre de las víctimas y la mayor de ellas a realizar la denuncia en el Área de Investigación de Violencia de Género Sexual y Familiar, conocida como Comisaría de la Mujer, de la Unidad Regional XVII de San Lorenzo, donde les tomaron la denuncia y comenzó a ampliarse la investigación.
“Se generó un efecto en cadena, todos se dieron cuenta que sufrían lo mismo a manos de las mismas personas en distintas oportunidades”, expresó el abogado y contó que así fue como las cuatro hermanas aseguran que fueron violadas por dos de sus tíos, con los que compartían cotidianeidad mientras sus padres trabajaban y también otras dos aseguran que fueron abusadas por un tercer hombre, padrino de la chica de 14. Todas las violaciones se dieron desde los 5 o 6 años de las pequeñas y se extendieron durante años.
Luego del trabajo de investigación, se estableció que dos de los hombres son empleados de la comuna de Gaboto, ambos hermanos del padre de las niñas, y otro es personal de la PDI (Policía de Investigaciones) de Rosario, esposo de la tía de las chicas y padrino de una de ellas. Finalmente, una semana después de la denuncia, fueron detenidos los tres en sus domicilios de Gaboto.
Flavia Campeis