Vive en inmediaciones de bulevar Eva Perón y Mosconi. Ingresaron a su casa a plena luz del día cuando ella no estaba y, además de la sustracción, los malvivientes causaron daños y desorden.
Vive en inmediaciones de bulevar Eva Perón y Mosconi. Ingresaron a su casa a plena luz del día cuando ella no estaba y, además de la sustracción, los malvivientes causaron daños y desorden.
Claudia Cassaglia es una vecina de barrio Díaz Vélez que vive en las inmediaciones de bulevar Eva Perón y calle Ingeniero Mosconi. Días atrás, por cuarta vez en los últimos años fue víctima de robo en su domicilio.
Cansada de la situación, reflexionó: “estamos transitando una pandemia que no tiene remedio y que nadie asiste: violencia de género, abandono de persona y mirar hacia el costado. Una pandemia sin vacuna que azota a la ciudad de San Lorenzo en los últimos tiempos, especialmente en barrio Diaz Vélez”, expresó en contacto con SINTESIS
“Como ciudadana me exigen el pago a término de impuestos y servicios y así lo cumplo, por eso también exijo que me brinden protección policial, que haya más rondas de patrullaje y que instalen en forma urgente una alarma comunitaria”, agregó la vecina.
Sobre el hecho de inseguridad que le tocó vivir la semana pasada, Claudia contó que “violentaron mi hogar haciéndome un gran daño económico y en mi salud” y detalló que el hecho ocurrió “entre las 11 y las 13 horas, a plena luz del día, pero nadie vio nada ni escuchó nada”.
Relató que “regresé a mi domicilio al mediodía y me encontré con un desastre total. Un saqueo literal” y agregó que descubrió “faltantes y daños e, incluso, defecaron en el comedor y en el dormitorio”.
Los delincuentes causaron gran desorden en la vivienda robada.
"Entré en shock y no quise ingresar a la casa porque tuve miedo de que haya alguien escondido y me pasara algo. Me ayudó un vecino que llamó a la policía. El móvil llegó muy rápido pero lamentablemente no quisieron tomar huellas digitales. Estoy segura de que se trató de más de una persona que entró después de violentar la reja de una ventana", agregó.
Entre los elementos que se llevaron los delincuentes , Claudia notó el faltante de “un teléfono celular, un reloj, un juego de parlantes, ropa, dinero en efectivo producto de la venta de productos de belleza que vende, un tensiómetro, un nebulizador y dos mochilas”, según enumeró y aclaró: “pasaron varios días pero todavía sigo limpiando el desorden y sigo descubriendo que faltan más cosas”.
A pesar de que denunció lo ocurrido en una presentación que luego amplió con más detalles, no es muy optimista sobre el curso judicial de su declaración. Con la triste experiencia de los casos anteriores en los que también fue víctima lamentó: “todo queda en la nada, en promesas incumplidas, y con un gran daño en lo económico y en mi salud. Por eso digo ¡basta por favor!”.
La mujer, de profesión periodista y locutora nacional, también reveló que luego del último robo mantuvo contactos con funcionarios del gobierno municipal para avanzar en su pedido de instalación de una alarma comunitaria.
A la vez rescató como hecho positivo “la actitud de mis vecinos, en especial de Silvina y Javier y sus chicos, María, Vilma y su familia y también María de calle Alberdi y Andrea, además de la psicóloga Beatriz Piedrabuena, mi familia y mis amigos por su apoyo incondicional”.
En el mismo sentido, Claudia agradeció “la asistencia de la comisaria Séptima, el trabajo de las asistentes sociales de la Subsecretaría de la Mujer, Ivana y Mariela y al secretario municipal de Coordinación Esteban Aricó”.